jueves, 18 de mayo de 2017

Fotoperiodista argentino retrata víctimas de la contaminación por agrotóxicos en cultivos transgénicos

mayo 18, 2017 | por Resumo Fotográfico


El fotógrafo Pablo Piovano recorrió más de seis mil kilómetros en el litoral y norte de Argentina para conocer personalmente a las víctimas de lo que considera que se trata de un genocidio silencioso. En la serie "El Costo Humano de los Agrotóxicos", Piovano retrata y denuncia a las víctimas de las políticas y actividades de las multinacionales del agrotóxico.

La obra documental es el resultado de cinco viajes que el fotógrafo argentino hizo a regiones agrícolas del país para retratar víctimas de contaminación por venenos que se utilizan en cultivos transgénicos. Son imágenes de personas con manchas y huesos en la piel, manos, brazos y piernas deformadas, niños con problemas resultantes de malformaciones fetales.

En una entrevista para el diario Sul21, Piovano contó que la idea para el proyecto surgió en 2014, tras ser presentado a datos médicos sobre la contaminación de personas por la utilización de agrotóxicos. "Lo que sucedía es que luego de pulverizaciones de agrotóxicos, las salas médicas se llenaban de niños. Con el tiempo, percibieron que los casos se volvían cada vez más peligrosos", dice.

Dijo que la fuerza de los grandes terratenientes que utilizan agrotóxicos y de los fabricantes de esos productos es muy grande en Argentina, por lo que el tema de la contaminación no es pauta en la prensa tradicional del país, sólo en vehículos independientes.

A finales de 2014, con recursos propios, partió para un viaje por las regiones norte, litoral del Pacífico y central, principales áreas agrícolas del país, donde se produce especialmente la soja. Este viaje inicial duró alrededor de un mes. "Allí, me di cuenta que el tema era muy serio", dice.



Antes de comenzar sus viajes, Piovano cuenta que realizó un trabajo de producción e investigación en el que se relacionó con científicos, médicos y activistas que le ayudaron a identificar a los personajes de su trabajo. Una vez allí, sin embargo, descubrió que el contacto con la mayoría de las familias afectadas era fácil, porque ellas "sentían la necesidad de tener sus historias narradas". "Cientos de puertas se abrieron para mí y eso es muy delicado, porque es la intimidad de las personas", relata.

En esas conversaciones, percibió que, salvo excepciones, la mayoría de los agricultores no utilizan los equipos de protección adecuados. "He entrevistado a una persona que pilotaba un avión de aerosol. El hijo tenía cáncer y seguía diciendo que no sucedía nada. Ante mí, tomó una tapa con glifosato. Esto ocurrió en 2014. En 2015, la Organización Mundial de la Salud declaró que el glifosato es posiblemente cancerígeno. Volví a verlo, el discurso era otro y no volvió a tomar el veneno ", relata Piovano. Según él, en la época, no sabía si el hombre tenía problemas de salud, pero se sabe que la región en que vive, San Salvador, tiene alta incidencia de cáncer.



El fotoperiodista no podía publicar el material en Argentina. "Tuve que hacer la doble tarea de divulgarlo", afirma, subrayando que pasó entonces a postular la posibilidad de captar financiamientos y presentar el trabajo ya realizado en festivales internacionales. Se acabó consiguiendo la financiación en medio de los viajes y, actualmente, prepara un libro que se publicará este año en Alemania.

A lo largo del camino, contó con la compañía de periodistas que escribieron textos para acompañar sus fotos, publicadas en Argentina y en el exterior. También logró exhibir el trabajo en un museo de Buenos Aires, pero cuando fue a realizar una segunda exposición en otro lugar, fue avisado dos días antes del lanzamiento que había sido cancelado.

La soja transgénica y el uso del glifosato fueron autorizados en Argentina en 1996. En dos décadas, el 60% del área cultivable del país pasó a ser ocupada por cultivos transgénicos que reciben anualmente más de 300 millones de litros de agrotóxicos.




















Para conocer más sobre el trabajo de Piovano, acceda: pablopiovano.com.