El fotógrafo brasileño Rafa Pires actúa en procesos de construcción de imágenes desde muy temprano, trabajando con Photoshop desde la versión 5.0 y actuando como director de arte en agencias. En cuanto a producciones más elaboradas, Rafa desarrolló una serie de imágenes llamada "Entre el (ir) real y el (casi) imaginario", donde utiliza pinturas y fotografías famosas, creando a partir de ellas una nueva imagen.
En una entrevista con el Portal Photos, el fotógrafo contó que siempre educó su mirada para percibir sutilezas. Durante la realización de su proyecto, Rafa notó que la foto de la niña afgana y la mona Lisa poseían la misma iluminación y que la composición de Steve McCurry también da el mismo efecto de que estamos siendo seguidos por los ojos de la protagonista. Para su sorpresa, no fue sólo la luz se encajó, sino también toda la anatomía y las proporciones presentes en la imagen. A partir de ese resultado, surgió la primera imagen de la serie.
Para la creación de la serie, la mayor fuente de ideas y repertorio de imágenes fueron sus clases en la facultad. Sus profesores siempre incentivaron mucho la investigación y el "consumo" de imágenes. Rafa solapó las fotos digitalmente para determinar el tamaño y la proporción en que debían ser impresas. Después de todo, todo el proceso fue manual: la impresión fue hecha en papel sulfito en tamaño A4, para que las fibras del papel quedaran evidentes cuando rasgadas, y luego fueron fotografiadas con una lente 50 mm o 100 mm aprovechando al máximo el espacio del sensor de la cámara. También se escogió cuidadosamente el sustrato para imprimir las imágenes listas, utilizando la impresión en canvas, para que los montajes quedaran más semejantes a las pinturas.
El foco principal de todo el trabajo es mostrar a las personas que después de entregar una foto al mundo, ya no tenemos el control sobre ella. Cada uno la interpreta según sus preconcepciones y su bagaje cultural.
"Escogí cuidadosamente las fotos y pinturas más conocidas, además de intentar mostrar a los demás esa mi visión medio loca de las cosas. Acabo de enamorarse de la historia de cada foto y me gustaría que ese trabajo instigara a la gente a investigar sobre cada una de ellas. Toda gran foto posee una gran historia, no es la imagen en sí que importa, sino todo el entorno, todo el contexto social e histórico. Sé que algunas personas van a consumir esas imágenes sólo estéticamente, pero también estoy seguro de que algunos van a interpretarlas de forma más profunda, pues conocen la historia detrás de cada una de las fotos."